Tu piel necesita 7.83 Hz: la ciencia detrás de la frecuencia de la Tierra

Vives rodeado de Wi-Fi, 5G y pantallas… pero tu cuerpo extraña algo invisible: la frecuencia de Schumann (7.83 Hz), la resonancia natural de la Tierra. Y sin ella, tu sistema nervioso se desregula.

La piel: tu antena biológica

La piel humana no es solo una barrera. Es un órgano sensorial electromagnético. Los queratinocitos en tu epidermis detectan campos de extremadamente baja frecuencia (ELF), como los que emite la Tierra. Cuando recibes 7.83 Hz, envían señales al nervio vago que reducen el cortisol y aumentan tu HRV (variabilidad de la frecuencia cardíaca), un marcador clave de resiliencia al estrés.

¿Qué pasa si no recibes esta frecuencia?

En entornos urbanos, estás en un “desierto electromagnético”. Las frecuencias naturales quedan enmascaradas por el ruido caótico de la tecnología. El resultado: fatiga crónica, insomnio, ansiedad.

Cómo reconectarte con la Tierra sin salir de casa

No necesitas caminar descalzo (aunque ayuda). Puedes aplicar 7.83 Hz directamente sobre tu piel. Un estudio en Frontiers in Neuroscience (2023) mostró que solo 10 minutos de exposición aumentan la HRV en un 31%.

En ChronoFit, personalizamos la frecuencia según tu estado fisiológico. Si tu HRV está bajo, activamos 7.83 Hz. Si necesitas enfoque, usamos 40 Hz.

👉 Descubre qué frecuencia tu piel necesita hoy

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